Bacatá Parlante consiste en poner en valor la bicicleta como medio para la apropiación, uso y disfrute de la ciudad de forma lúdica y creativa, a la vez que propone contenidos críticos que serán transmitidos por medio de una instalación interactiva que explora a través de diferentes materialidades, -bambú, metal, madera- el desarrollo de un prototipo de bici-generador de energía eléctrica que se cargue a través del pedaleo de los participantes. Con la fuente de energía colectiva, se activarán interrupciones sonoras a través del dispositivo bici-máquina que funcionará como amplificador de situaciones controversiales que percibimos cuando nos movemos en bicicleta.
La propuesta se compone por los siguientes elementos:

• Bici generador: Dispositivo que generará energía para activar la instalación a partir de la participación del espectador.
• Parlante escultórico BAKATA – Prototipo de objeto escultórico que incorporará el mapa de Bogotá y sus localidades como concepto plástico. Amplificara el registro/biblioteca compilado previamente de los paisajes sonoros de Bogotá enmarcados en los paisajes culturales y las piezas desarrolladas en el laboratorio de creación (taller de creación de paisajes sonoros in situ)
• Plataforma de producción de paisajes sonoros in situ: Laboratorio de creación de paisajes sonoros en sitio con registros grabados previamente.
En conclusión, Bacatá parlante aborda los procesos de memoria material e inmaterial, el trabajo colaborativo, la resignificación del espacio público, la bicicleta como agente transformador y el debate como mecanismo de denuncia que amplifica las voces colectivas. Así mismo, ejecuta el trabajo en red con comunidades y organizaciones barriales interesadas en autogestionar y auto- construir alternativas creativas desde la base.
Son innegables los problemas que ha significado el tráfico y la movilidad en las ciudades,en donde el automóvil ha sido el centro de atención y referente para la creación de modelos urbanísticos, no sólo por la literalidad en el momento de replicar principios basados en el modelo de producción Fordista, donde la producción en serie y en masa han terminado por construir gran parte de los territorios que habitamos en el mundo.

Bogotá es una ciudad que no escapa a esta dinámica, sin desconocer los esfuerzos por la implementación de sistemas de movilidad, pero que no llegan a ser sistemas integrados, capaces de incluir a la bicicleta y al ciclista como un actor que aporta a la congestión urbana, al cuidado del ambiente y la salud. Es fundamental reconocer el papel que juega el transporte en bicicleta más allá de la romantización de la autosuficiencia, sin contemplar lo complejo que representa el escenario de moverse en bici, donde el tema de seguridad tiene doble arista. Por un lado con temas seguridad falta de infraestructura y por otro la falta de cultura educación y pedagogía a la hora de movilizarse por la ciudad, bien lo decia lewis Mumford “Añadir carriles a las autopistas para solucionar congestión vehicular es como aflojar tu cinturón para curar obesidad'.
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